¿De qué hablamos cuando hablamos de trauma?
Hablamos de trauma emocional o psicológico cuando se ha sufrido un evento que ha sobrepasado los recursos y las estrategias que tenía la persona en ese momento.
Es por esto que no hay “traumas generales”, sino que al depender de los recursos y estrategias disponibles puede que para una persona sea un trauma un evento o situación recurrente que para otra persona no.
El trauma es como una huella que te marca, y puede ser simple o complejo.
Hablamos de trauma simple cuando el evento traumático ha sido puntual pero con un impacto muy fuerte en el mundo emocional de la persona.
Y por otro lado, hablamos de trauma complejo cuando el evento traumático quizá no ha tenido un impacto tan fuerte de manera individual, pero se ha repetido de manera tan recurrente que ha terminado dejando la misma huella emocional que puede dejar un trauma simple.
Aunque no se puede borrar esa huella, sí es posible añadir nuevas experiencias emocionales que te permitan ver lo sucedido desde otra perspectiva.
Cuando hablamos de superar un trauma, no hablamos de borrarlo por completo de tu vida ya que esto es imposible. Hablamos de integrarlo de manera que deje de dominar tu vida.